viernes, 9 de abril de 2010

Ella...

Su nombre es Cinthia. Nos conocimos el año 2007, yo entré a una sala de chat buscando conversar un rato sobre lo que estaba viviendo o más bien sintiendo. Poco tiempo antes yo habia terminado con una relación que me tenía un poco cansada, no estaba triste precisamente cuando hablamos la primera vez pero si estaba un poquito cansada de los fracasos en el plano amoroso.
Hablamos de nuestras experiencias en cuanto a parejas se refiere, le conté cosas que sólo algunas personas sabían, desde un principio me dio la confianza. Me habló de su trabajo y tantas otras cosas pero lo más relevante para mi fue saber como se sentía respecto a la muerte de unas de sus amigas que había sucedido un año antes (si mal no recuerdo) y tenía penita porque se acercaba la fecha de su conmemoración, por decirlo de alguna manera, y ella tenía todo el recuerdo muy presente... pude sentir su tristeza y me conmovió tanto que quise subirle el ánimo hablando de otras cosas y recuerdo que lo conseguí, no sé si esa vez intercambiamos números pero no pasó mucho tiempo en que las llamadas se volvieron necesarias tanto de su parte como de la mía. La primera vez que hablamos por teléfono... cómo olvidarlo, hacía mucho viento y tuve que detenerme en una tienda ubicada en el centro para poder escucharte mejor, incluso recuerdo la hora, no pasaba más allá de las 23hrs. Enganché por la voz y ella obviamente también. Las conversaciones cada vez eran más extensas, tanta era la confianza que hasta me dio el número de su casa para poder llamarla ahí y no tuviera que gastar tanto en el celu, a veces hablábamos poco más de una hora y yo tenía que pedir que me apagaran la luz de la cabina para no sentir el calor que provocaba la ampolleta sumado al tiempo que pasábamos hablando, me hice cliente del lugar y hasta los tipos se aprendieron el número de memoria (jajaja).
En realidad no sé por qué estoy siendo tan detallista si en el fondo son pocas las cosas que necesito escribir...
Ha sido la única persona que ha sabido cómo tocarme, conoce mi cuerpo como ni siquiera yo he podido conocer. Como ella dice a veces; mi es cuerpo es un mapa del que sólo ella tiene conocimiento. No logro entender qué nos pasó, es algo mutuo, sabemos que independiente de las vueltas de la vida y dónde, cómo y con quién estemos, siempre habrá algo que nos haga recordarnos... (tengo ganas de llorar)...
Recuerdo la primera vez que la besé, como se dio todo... el día de la defensa de su tesis, mi viaje relámpago en compañia de mi mejor amigo, el encuentro en el metro, la primera impresión...
Se notaba un poco el nerviosismo de parte de todos, tu amiga y mi amigo sólo nos miraban, yo apenas y podía respirar, estaba tan nerviosa, percibí un poco de indiferancia pero después entendí que fue por respeto un poco a tu amiga, ya que según entendí, ella nunca había conocido a una mujer con la cual tú hayas mentenido una relación de pareja.
Cuando esperábamos los resultados de tu defensa, todos estábamos en las escaleras de emergencia del edificio, tu mejor amigo, tu ex pololo (del colegio) y su novio, tu amiga y mi amigo, quería espacio y tiempo para estar a solas, no hablé sino hasta ese momento, les pedí a todos que se alejaran, que nos dejaran solas... y tú te acercaste, y pasó, nuestro primer beso... y se sintió como un roce, me tomaste de las manos y nos paramos, nos volvímos a besar y ahí... ahí fue que me enamoré. Mientras tu lengua tocaba la mía, en mi estómago se dejaron sentir las típicas mariposas... pero lo más increíble fue que ambas nos pusimos a temblar, fue como si nunca antes hubiese dado un beso... te juro que aún lo recuerdo y se me pone la piel de gallina.

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